domingo, 26 de febrero de 2012

Abrazar lo que rechazamos.


"La verdadera sabiduría de la vida”, consiste en alcanzar la otra orilla en cada paso del camino". 

Una historia  La importancia del bosque 

   Todos los maestros dicen que el tesoro espiritual es un descubrimiento solitario.    ¿Entonces por qué estamos juntos? -preguntó uno de los discípulos a Nasrudin, el maestro sufi.    Ustedes están juntos porque un bosque siempre es más fuerte que un árbol solitario -respondió Nasrudin-. El bosque mantiene la humedad del aire, resiste mejor a un huracán, ayuda a que el suelo sea fértil.    -Pero lo que hace fuerte a un árbol es su raíz. Y la raíz de una planta no puede ayudar a otra planta a crecer.    -Estar juntos en un mismo propósito, es dejar que cada uno crezca a su manera; éste es el camino de aceptación de lo diferente-.    
 Una tendencia humana, muy cultivada en nuestra sociedad, es la de desfavorecer al que piensa de forma distinta. Nos gusta creer que lo que nosotros hacemos es siempre mejor a lo que hacen los demás; estamos convencidos de que nosotros sí somos buenos y extraordinarios, y los otros son los equivocados, los consideramos vulgares, temerosos, y los rechazamos porque su luz nos recuerda lo que no somos. Observa como te llegan estas palabras.


La otra tendencia humana es en proyectar las miserias personarles en el otro, me refiero a justificar el víctimismo, egocentrismo: como escúcheme, atiéndame, míreme y un sin fin de dependencias, apegos  y desconocimiento personal, de este modos  pasamos a acusar al otro de los errores y frustraciones propias, pues, nuestra mente es también como un jardín secreto abandonado en el que las zarzas y las malas hierbas, -los pensamientos obsesivos, las emociones perturbadoras, los condicionamientos aprendidos.-, crecen por doquier viviendo en el rechazo… como la superficie del agua agitada por olas. Podríamos decir, que el viento que las produce son las emociones perturbadoras, el apego, el rechazo... si observamos, la luna llena cuado se refleja en el agua está, pero debido al movimiento de la superficie del lago, el reflejo de la luna en el agua lo vemos fragmentado.
La auto-observación nos muestra los dos aspectos de la realidad: el interno y el externo. Si buscamos en el exterior la causa de nuestra desgracia culpando siempre a algo o a alguien e intentando cambiar la realidad externa. Nuestra cesación de fracaso e insatisfacción es constante. Porque  ignoramos nuestra realidad interna, no comprendemos que la causa del sufrimiento se encuentra en nuestro interior, en nuestras reacciones ciegas hacia las sensaciones agradables o desagradables. 
Cuidémonos de no caer en actitudes extremas: no creas que por haber clarificado un par de cosas ya lo has clarificado todo, no creas que por que has encontrado zonas oscuras, toda tu mente es oscuridad. La oscuridad existe gracias a la luz que la percibe. Como decía el maestro Kodo Sawaki: "La oscuridad de la sombra del pino depende de la claridad de la luna".

 buen dia