jueves, 27 de octubre de 2011

Identificarnos con la enfermedad

Es conveniente que tengamos en cuenta que las enfermedades como tantas creencias que  heredamos, es parte del lote familiar, y para qué nos sirve identificarnos con la enfermedad que sufre nuestra madre o padre, de esta manera  nos sentimos queridos y reconocidos e integrados por la familia .

Esta programación es como la profecía cumplida, recuerdo que yo sentía pánico pasar por la edad en la que murió mi madre de cáncer de útero, ¡qué alivio! cuando esas fecha en el transcurso del tiempo se alejaron de mí, sin embargo, la creencia me producía miedo a cumplir años.

La teoría de las creencias que legamos de nuestra familia es un hecho, a pesar de que es una información  a priori, no tiene por qué suceder, algo que solo está en la imaginación; pero, la fuerza que tienen dentro de nosotros la familia, crea un vinculo, nos identificamos y lo asumimos como un acontecimiento seguro, y por tanto llegará a cumplirse,  se volverá realidad padecer la mismas enfermedades de la familia. El sistema familiar, esta entidad nos da un mapa, una referencia con el que funcionamos es lo que llamamos nuestro sistema de creencias y es el principal condicionante que tenemos.    Por ello NECESITAMOS DESAPRENDER, pero rechazamos desaprender algo que habíamos aprendido, y a veces con fuego y sufrimiento, deshacernos de las falsas creencias, de las viejas estructuras…de la vida basada en la pertenencia a un sistema familiar que enferma a sus hijos, no es fácil. Modificar creencias o de sustituirlas por otras constituyen la clave del cambio para liberarnos de enfermedades que solo están en nuestra creencia o imaginación. Estudia tus creencias, cuestiónalas y empezarás a vivir más libre, pues si la libertad nos permite elegir, las creencias no son sino una cárcel invisible en la que nos encerramos.
Nosotros podemos "aprende a aprender" es decir, a crear conceptos, emociones y comportamientos que nos sirven para el aprendizaje de autoconstruirnos.
Resurge como el ave Fénix de las cenizas y atrévete a transformarte...nueva, libre, llenos de salud
metáfora Zen
Un día, un novicio se presentó para recibir las enseñanzas de un sabio maestro.
-Primero tendrás que hallar la respuesta a una pregunta, le dijo uno de los discípulos. Si lo consigues, el maestro te aceptará como alumno dentro de tres años.

La pregunta fue presentada y el alumno se esforzó hasta que hubo encontrado la respuesta.
-Tu respuesta es correcta. Ahora puedes marcharte y esperar que pasen mil y un días; sólo entonces, podrás volver aquí para recibir la enseñanza.

El novicio estaba encantado, tras mostrar su agradecimiento se le ocurrió preguntar:
-¿Qué habría ocurrido si no hubiera encontrado la respuesta correcta?
-¡Ah, en ese caso, te habría admitido al instante!

Buen día

No hay comentarios:

Publicar un comentario